Empezaré enseguida diciéndote que no puedes perderte el Bioparc de Valencia
Cuando paseas por una gran ciudad, normalmente puedes contar los árboles con los dedos de una mano, quizá en raras ocasiones incluso añadas los dedos de los pies, el caso es que hay muy, muy poco verde.
Afortunadamente, hay excepciones y éste es el caso de Valencia. Con el Bioparc y los 11 km de Jardines del Turia creados en el lecho del antiguo río, esta ciudad muestra un gran interés por el bienestar de sus ciudadanos y turistas.
Tanto si estás planeando unas vacaciones como si simplemente buscas qué ver en Valencia te recomiendo encarecidamente que incluyas Bioparc en tu itinerario.
El Bioparc en Valencia
El Bioparc es un nuevo concepto de parque que se inauguró en 2008, sustituyendo a la antigua estructura, el clásico zoo. En lo que a mí respecta, fue una experiencia maravillosa, no esperaba poder ver esta convivencia entre el hombre y el animal.
Prácticamente todo el Bioparc se ha estructurado de tal forma que los animales puedan sentirse como en casa y entre los animales y el hombre no exista esa clásica división dictada por las barreras. Si acaso, la división se hace estudiando las características de los animales mediante la técnica de zoo-inmersión.
Esta técnica no permite ver las barreras, están «ocultas» a la vista del visitante, que tiene así la sensación de estar inmerso.
Por poner un ejemplo: en el caso de los chimpancés, simplemente se han utilizado rocas que no tienen asideros por los que trepar, a pesar de que la imagen del lugar se asemeja a la realmente presente en la naturaleza.
Básicamente, quien construyó el Bioparque simplemente utilizó la calabaza (es decir, el cerebro). Estudió las características de los animales y las utilizó en su beneficio. Todo el Bioparc se creó con estas prerrogativas.
Hay que destacar que no sólo se diseñaron los entornos de los animales. La planificación del Bioparc de Valencia se ha hecho de forma que todo el parque esté en armonía. El mismo recorrido que hacen los visitantes forma parte del diseño.
¿Dónde está situado el Bioparc?
El Bioparc está situado en el Parque de Cabecera, al final de los Jardines del Turia, al noroeste de la ciudad.
¿Qué es? ¿Cómo está estructurado?
Al Bioparc también se le llama«un trozo de África«. De hecho, el propietario quiso recrear el entorno africano estructurando el parque en 4 zonas: Sabana, Bosque Ecuatorial, Madagascar y Humedales. Ocupa 100.000 metros cuadrados y hay unas 250 especies animales con un total de 4.000 ejemplares.
Desde la taquilla, para entrar en la zona del parque, tienes que cruzar el largo puente de 154 metros y la primera zona es la de Madagascar. En esta zona existe incluso la posibilidad de hacer un tramo en pleno contacto con los lémures, entras en su hábitat y caminas rodeado de los lémures que como astillas pasan a tu alrededor mirándote con curiosidad. Es una buena sensación también porque son animales muy amistosos.
Continuando en el Bioparc, te encuentras con la zona donde hay panteras, guepardos, babuinos, también pasas por la reconstrucción de la cueva de Kitum.
Y luego te diriges a la Sabana, con su terreno árido, sus depredadores imparables y sus mamuts, como rinocerontes y elefantes.
El Bioparque es sin duda una atracción que no puedes perderte si estás en Valencia. Si tienes niños y vas allí con ellos, estoy segura de que les encantará y les harás muy felices. Yo misma fui feliz de niña, me los imagino.
También me gustaría destacar que dentro del parque hay una cafetería y también un restaurante donde puedes tomarte un merecido descanso.
¿Cómo llegar al Bioparc de Valencia?
Por supuesto, existen los medios de transporte habituales para llegar:
- En autobús con las líneas 29-61-67-81-95
- En Metro con las líneas 3 ó 5, bajando en la parada Nou d’Octubre
Si vas a Bioparc, estarás eligiendo un turismo ético y medioambientalmente sostenible por un día. Así que, ¡qué mejor manera que recorrer los Jardines del Turia en bicicleta!
Desde 1957, la ciudad ha cambiado de cara tras una crecida del río que causó muchos daños. Para que no volviera a ocurrir, se desvió el curso del río y en Valencia sólo quedó el cauce.
En lugar de construir nuevos barrios, los valencianos fueron previsores y utilizaron el lecho del río para crear un enorme parque donde todos los ciudadanos e incluso los turistas pueden relajarse y practicar deportes. El espacio entre un puente y otro fue diseñado por distintos diseñadores y, por tanto, los espacios en sí también están concebidos de forma diferente. El caso es que este parque llamado Jardines del Turia es el pulmón verde de la ciudad y los valencianos están muy orgullosos de él.